¡Me parece preciosa! Aunque me gustaría anaranjada.
6 comentarios:
Anónimo
dijo...
No se como decirlo, pero creo que tengo que confesar algo… Hace unos pocos minutos, después de haber indicado la dirección a la que quería llegar, cuando al fin el navegador me permitió visualizar por completo el contenido del blog, pensé que me había equivocado… No esperaba encontrarme la imagen de un Toyota FJ Cruiser 08 amarillo, ni mucho menos una confesión (tan directa y tan clara) de deseo hacia esta maquina. Pero espero que usted, y que todxs lxs que me leen entiendan que la sorpresa se deba quizá a mis prejuicios, que desde luego son totalmente cuestionables… No recuerdo cual era mi último recuerdo del blog, en general, creo que volvía para encontrar sus delicias del lenguaje, pero al descubrir su relación con esta maquina amarilla, cuyo diseño y proporciones me llenan de reminiscencias militares, creo que me he quedado perplejo… No quiero decir con esto que me haya desencantado, o que tenga un arrebato pasional que haga que no quiera volver a leer nada de lo que usted escribe, sino que me he quedado perplejo… Creo que me ha hecho pensar en el precio del petróleo, me ha hecho pensar en amarillos y naranjas, e incluso me ha hecho pensar en Marinetti y el Manifiesto Futurista…
hola, xgonzalez, como vas? bueno, mirá la cosa es la siguiente. No te vas a desilusionar de mí por eso, proque seguramente hay más razones para hacerlo. Te cuento. A mí me encantan los carros, me gusta manejar, manejo super bien y el gusto viene desde mi familia. Mis tíos corrían, hay uno que con los amigos, fueron los primeros en armar carros, y el que haya estado metido en el cuento de los carros sabe quién es.
Claro que tenés razón sobre el precio del petróleo y sobre lo superfluo que puede llegar a ser que a mí, que parezco como toda profunda e intensa (también lo soy) me gusten estas cosas y sí. Este fin de semana estuve en Santa Fe de Antioquia y nos reímos mucho porque yo dije: "gasolinera!!! super gasolinera", pero pues claro, mirá, sentir el poder de una máquina es una delicia. A mi me encanta, pero igual, montar en bicicleta, andar por ahí, caminar por la manga... todas esas cosas que seguramente sería más propicio publicar.
Pero ni modo, soy yo, incluido el gusto por los carros.
Ahora, no que yo me vaya a comprar ese carro, ves? no me voy a gastar esa $ en un carro, no faltaba más, pero que me gusta, me gusta y que lo tendría feliz, ay, qué delicia manejar ese aparato. Mirá la página y vas a ver por dónde se mete y ay, qué delicia. O no te gustan esas cosas?
bueno, no sé si en realidad la vendan en san andresito, pero me parece maravilloso que me la manden, pues la necesito el año entrante para la conmemoración, para andar por toda Colombia en una estación móvil con internais y de todo... mejor dicho... los invito
Sigue siendo una belleza y un antojo, por si a alguien se le ocurre algo. No me trasnocha, pero me encantaría andarme las carreteras montada en ella. Ey, Toyota, ¿será que me hacen una anaranjada? Si no, se las recibo amarilla o azul (o ya del color que decida Matías) en todo caso.
6 comentarios:
No se como decirlo, pero creo que tengo que confesar algo…
Hace unos pocos minutos, después de haber indicado la dirección a la que quería llegar, cuando al fin el navegador me permitió visualizar por completo el contenido del blog, pensé que me había equivocado…
No esperaba encontrarme la imagen de un Toyota FJ Cruiser 08 amarillo, ni mucho menos una confesión (tan directa y tan clara) de deseo hacia esta maquina. Pero espero que usted, y que todxs lxs que me leen entiendan que la sorpresa se deba quizá a mis prejuicios, que desde luego son totalmente cuestionables…
No recuerdo cual era mi último recuerdo del blog, en general, creo que volvía para encontrar sus delicias del lenguaje, pero al descubrir su relación con esta maquina amarilla, cuyo diseño y proporciones me llenan de reminiscencias militares, creo que me he quedado perplejo…
No quiero decir con esto que me haya desencantado, o que tenga un arrebato pasional que haga que no quiera volver a leer nada de lo que usted escribe, sino que me he quedado perplejo…
Creo que me ha hecho pensar en el precio del petróleo, me ha hecho pensar en amarillos y naranjas, e incluso me ha hecho pensar en Marinetti y el Manifiesto Futurista…
Con admiración y aprecio
Oigame señorita y no le pide mas el cuerpo... eso si, desde que no la engallés con rines de alumuminio...
hola, xgonzalez, como vas?
bueno, mirá la cosa es la siguiente. No te vas a desilusionar de mí por eso, proque seguramente hay más razones para hacerlo.
Te cuento. A mí me encantan los carros, me gusta manejar, manejo super bien y el gusto viene desde mi familia. Mis tíos corrían, hay uno que con los amigos, fueron los primeros en armar carros, y el que haya estado metido en el cuento de los carros sabe quién es.
Claro que tenés razón sobre el precio del petróleo y sobre lo superfluo que puede llegar a ser que a mí, que parezco como toda profunda e intensa (también lo soy) me gusten estas cosas y sí. Este fin de semana estuve en Santa Fe de Antioquia y nos reímos mucho porque yo dije: "gasolinera!!! super gasolinera", pero pues claro, mirá, sentir el poder de una máquina es una delicia. A mi me encanta, pero igual, montar en bicicleta, andar por ahí, caminar por la manga... todas esas cosas que seguramente sería más propicio publicar.
Pero ni modo, soy yo, incluido el gusto por los carros.
Ahora, no que yo me vaya a comprar ese carro, ves? no me voy a gastar esa $ en un carro, no faltaba más, pero que me gusta, me gusta y que lo tendría feliz, ay, qué delicia manejar ese aparato. Mirá la página y vas a ver por dónde se mete y ay, qué delicia. O no te gustan esas cosas?
Nosotros te ofrecemos una igualita. Decínos no más a dónde te la mandamos, que ya mismo vamos a comprarla a San Andresito.
bueno, no sé si en realidad la vendan en san andresito, pero me parece maravilloso que me la manden, pues la necesito el año entrante para la conmemoración, para andar por toda Colombia en una estación móvil con internais y de todo... mejor dicho... los invito
Sigue siendo una belleza y un antojo, por si a alguien se le ocurre algo. No me trasnocha, pero me encantaría andarme las carreteras montada en ella.
Ey, Toyota, ¿será que me hacen una anaranjada? Si no, se las recibo amarilla o azul (o ya del color que decida Matías) en todo caso.
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