miércoles, marzo 28, 2012

Algunos amores

Herman Hesse
Omar Khayyam
Malcolm Lowry
Richie Hawtin

"una de estas cosas no es como las otras, es diferente de todas las demás"
lo siento, pero lo tengo en mis últimas listas

Esta lista se seguirá ampliando seguramente

Omar Khayyam (otro amor mío)

Nació en Nichapur, Persia, hacia el año 1040 de la era cristiana, y vivió cerca de ochenta años.
Libertino, sibarita, ácido, místico y profeta, estudió Matemáticas y Astronomía, reformó el calendario musulmán, cultivó el Derecho y las Ciencias Naturales, pero todo le resultó insuficiente a la hora de resolver el misterio del Universo, las pasiones humanas y la existencia misma.
Se destacó en el plano de las letras por sus famosas «Rubaiyat», que constituyen una alabanza al brindis, una enorme plegaria fragmentada en estrofas que remiten a la celebración del vino y del goce del instante, frente a la finitud de la vida.


uau!
y yo pensaba que sólo me gustaban sus poemas!!!!!
lo amo!!!!!
es decir!!!
 el calendario musulmán actual es el que el man reformó!!!
uau!

Vocación, de Rabindranath Tagore


Todas las mañanas, a las diez, cuando suena el gong, por el camino de la escuela encuentro al vendedor que grita:
-¡Brazaletes de cristal!
Nunca tiene prisa, ni está obligado a seguir ningún camino ni llegar a ninguna parte, ni volver, ni volver a una hora fija.
¡Cómo me gustaría ser un vendedor y pasarme el día por las calles, gritando:
-¡Brazaletes, brazaletes de cristal!
Cuando, a las cuatro de la tarde, vuelvo de la escuela, contemplo por la verja de aquella casa cómo el jardinero cava el jardín.
Trabaja como quiere con su azadón, se llena el vestido de polvo, nadie se preocupa de él si se tuesta al sol o si lo cala la lluvia.
¡Cómo me gustaría ser jardinero y cavar, cavar siempre sin que nadie viniera a interrumpirme!
Al anochecer, cuando mi madre me mete en la cama, veo por mi ventana abierta al vigilante, que pasea arriba y abajo por la calleja.
La calleja es estrecha y está solitaria, la farola se yergue como un gigante con un solo y enorme ojo colorado.
El vigilante hace oscilar su linterna al andar, su sombra anda junto a él y nunca, nunca se va a acostar.
¡Cómo me gustaría ser vigilante y andar por la calle toda la noche, y hacer correr las sombras con mi linterna!
FIN

martes, marzo 27, 2012

lunes, marzo 26, 2012

Ya no me apego más a lo que una vez me hizo feliz

Ya no me apego más a lo que una vez me hizo feliz, pues ya no hay una escena que soporte esa felicidad: ya la realidad ha cambiado y seguir apegándome  a ella, peliando por esa realidad feliz del pasado sólo puede traerme infelicidad.
Ahora, cada vez me desapego más a cosas y valoro lo que realmente tengo.
Encuentro la felicidad en espacios que me había negado por apego a un pasado que ya no existe y que quería recuperar o abrirle espacio a toda costa, contra viento y marea.
Ahora cada vez me importan menos las cosas sin importancia, o sobre las que no tengo control, ahora, cada vez, cargo menos y me mantengo más cargada.
Ahora, cada vez, me mantengo más vacía, como el totumo de Fernando González que le recomendara a mi mamá cuando estaba chiquita mantenerse vacía "así, como este totumo".
Ahora, cada vez vivo más mi presente y entiendo más el pasado y el futuro.
Como me dijo Jorge Zuluaga sin sorpresa el día de la exposición de los Mayas en el Parque Explora: "te iluminaste, escribí un artículo."

Nota: fue escrito hoy 26 de marzo de 2012.
… jajjaja… y estoy tan en el presente que lo feché en 2007, en mi libreta 134…

viernes, marzo 09, 2012

Ya el Maya en el Radar y mis problemas psicológicos

… Tantas posibilidades que no sé cómo aterrizar esto.

Resulté entendiendo una cosa tan rara…
el Tiempo…
el Tiempo…
el Tiempo y el espacio
y estoy codificando eso.

Ya sé cómo meterle el calendario Maya al Radar...
Eso me supone una tesa,
Eso supone que debería vivir de lo que he inventado y hecho…
pero no lo logro aún
- ni nunca -
¡Qué desespero ser yo!
¡Qué inutilidad!

Tantas posibilidades que quiero es llorar.
Se me hace un nudo en la garganta y no tengo ni idea qué hacer.
Me levanto a las dos de la mañana
(desde antes, en realidad)
acudiendo a la noche y su silencio suavizado por el agua que cae allí
a ver si me ayuda a entender lo que debo hacer para lograr vivir de lo que hago, de lo que inventé,
pero no logro hacerme creer que puedo vivir de lo que hago.
Aún no logro creer.
Me excuso pensando que mi ser habita una realidad menos mundana que ésta que me obliga a pensar en ponerle números a cosas concretas cuando estoy pensando en la inmensidad del tiempo y al intentar ponerle números a eso nada me da.

¿Cómo cuantificar mi trabajo si es tan raro que no cabe en ninguna parte?
¡Puras excusas!
aún no creo en lo que hago, aunque sé que es tan teso.

Ea! yo sí tengo mucho problema psicológico.

Quiero alguien que haga esto por mí o me ayude
Qué encartada estoy conmigo.

Me da rabia cada idea nueva que tengo,
porque cada idea es tan lejos de esta realidad que sé que me va a costar otro tiempo más de iliquidez,
pues me lleva más lejos de esta realidad en la que no sé cómo hacer valer el mundo de cosas que sé.

¡Qué mundo de problemas psicológicos los que tengo!

sábado, marzo 03, 2012

Tú en París y yo en bus

Mis queridos amigos, les presento acá mi primera canción.
CLICK AQUÍ PARA OÍRLA

Tú en París y yo en bus


Amanece en París,
Media noche es por aquí.
¿A quién vas a llamar
Que pueda entender?
Les Champs Élyseés,
Vino francés.

"A mi hija y a vos,
A tu sensibilidad
¿A quién voy a llamar?",
Te preguntás.

El vino francés te hizo olvidar...
- ¿o recordar?
Pensé que todo sería igual
Y sonreí.

Tú en París y yo en bus
Tú en París y yo en bus
Les Champs Élyseés,
Vino francés
Tú en París y yo en bus
Tú en París y yo en bus

Otra vez en Medellín
Compruebo que no,
Que era sólo París
Que te hacía pensar
Que sólo yo podía entender
Lo que era para vos
Estar en París,
Les Champs Élyseés,
El vino francés
- que decís que no merecés...


Tú en París y yo en bus
Tú en París y yo en bus
Les Champs Élyseés,
Vino francés
Tú en París y yo en bus
Tú en París y yo en bus

… feliz …