domingo, noviembre 18, 2007

La tristeza del silencio

Me gusta el silencio. Soy adicta a él. Sin embargo, hay silencios dolorosos. Éste es uno de ellos; este silencio indeseado.

1 comentario:

Juan dijo...

Esos silencios indeseados son la sentencia a muerte del amor, por ejemplo.

A mí me pasaba, en los últimos días de mi primer y único noviazgo... Cuándo hablaba por teléfono con ella ya nada nos decíamos, y esos segundos que durábamos callados me parecían eternos. A ella se le acabó el amor. Ahora es sólo un supuesto cariño, que no siento por ningún lado.

Esos silencios indeseados son la indiferencia misma.

Atentamente,
el mismo Juan que odia Facebook. ;)