El Gardel de Dora Ramírez: 20 años del Telón de Boca del Teatro Pablo Tobón Uribe
El llamado telón de boca es el gran telón que cierra la embocadura a la altura del proscenio; se mantiene cerrado antes del comienzo de la representación y durante el intermedio o los entreactos, a fin de ocultar al público los posibles cambios en la escenografía.
(Wikipedia)
Serie Mitos: Carlos Gardel, fue la primera obra que produjo la artista de esta serie, que tendría personajes artísticos y políticos que marcaron su vida. En 2002 “Dora Ramírez donó los derechos de su obra “Gardel en Llamas” al Teatro Pablo Tobón Uribe, ubicado en la avenida La Playa e inaugurado el 2 de agosto de 2002, para ser utilizada como telón de boca.”*
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Obra original |
Recuerdo mi vestido strapless, ajustado y negro, mostrando la barriga en la que ya se veía a Matías creciendo adentro: que todos se enteren de una vez. Canté una canción en homenaje a la gran artista Dora Ramírez, mi abuela compinche, con quien compartí tanta felicidad, en el evento de lanzamiento del telón del boca del Teatro Pablo Tobón Uribe, el más antiguo y emblemático de la ciudad de Medellín, que tendría ahora a su Gardel como parte integral de este espacio que hacía parte también de su propia historia, ya que, gracias a que su padre, José Ramírez Johns, era el Presidente de la Sociedad de Mejoras Públicas de Medellín, el filántropo Pablo Tobón Uribe donó el dinero para su construcción.
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| Foto: Carlos Tobón |
Al bajar del escenario, me senté a ver el resto del homenaje, casualmente, al lado del curador Alberto Sierra, amigo mío desde unos años antes. Él, entre palabras un poco temblorosas y una risita nerviosa, me dijo: El 15% que soy hombre, se muere por vos, y se levantó. Yo me quedé riéndome, como siempre que hablaba con él.
“Nuevamente fue el muralista Libardo Ruiz el encargado de reproducir su cuadro, sin cobrar nada, porque Dora entendió 'que se está difundiendo el arte y éste ennoblece y embellece la vida, es una buena manera de lograr la paz'.
A principios del milenio pensaba hacerle un grandísimo homenaje en vida que llenaría la ciudad del color del que ella llenó nuestra vida y del que se le hizo un reconocimiento en el Concejo de Medellín, liderado por el entonces concejal Gabriel Jaime Rico y un bellísimo concierto de Sultán (antes Los Árboles) en el Teatro de Comfama San Ignacio en el centro de la ciudad, donde ella bailó una de sus canciones: “Ella es como las estrellas”… como si la canción hubiera sido compuesta para ella, que era como las estrellas:
https://www.youtube.com/watch?v=hh2vl1lpNNc&ab_channel=JaimeAndr%C3%A9sBret%C3%B3n
Ella es como las estrellas
es tan bella como el Sol
pero no sabe nada de la Tierra.
Su camino la llevará
por el Universo hasta tocar
ella contiene el poder
de amarte para siempre.
El Teatro Pablo Tobón Uribe, símbolo de la cultura en la ciudad, ha fomentado la difusión de las expresiones artísticas, requirió para pasar la obra al telón de 21 metros de largo por 9 metros de ancho, a la maestría de Libardo Ruíz, quien lo hizo gratuitamente, al igual que la empresa privada “Fabricato y Pintuco” que donaron los materiales.
Para este homenaje su amigo recién fallecido en aquella época, el gran poeta José Manuel Arango (1937-2002), escribió, a petición mía, un bellísimo párrafo que hablaba sobre su alma y fue leído ese día… las tragedias de la vida: desapareció en un computador que me robaron y, desafortunadamente, en los archivos del Teatro parece no reposar.
También cantó mi madre, Dora Luz Echeverría, Maria Clara y Adelaida bailaron, es lo que recuerdo. También recuerdo el teatro lleno, así que debe haber más recuerdos regados y fotos por ahí, que me encantaría ver algún día que tal vez llegue.
Por ahora, nos queda esa belleza de obra que son tres obras en una:
El Gardel y las dos constelaciones de los lados:
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Foto: Carlos Tobón |
En otra nota, Sergio Esteban Vélez se refiera a Dora Ramírez: "A pesar de que ya es bisabuela, tiene energía y alientos de sobra. Baila tango todos los días y esta pasión dancística la ha llevado, en el último decenio, a representar al país en importantes auditorios de Sudamérica, España y los Estados Unidos.
Después de triunfar como pintora y ya cuando era considerada como una de las máximas mujeres del Arte Colombiano, se le dio por dejarse llevar por el encanto arrollador del tango, y, contrario a lo que algunos habrían podido esperar, se ha lucido en la realización de su nueva vocación.
Ella no se llama a sí misma pintora ni bailarina: se siente simplemente “artista” y tiene claro que, justamente, estar cerca del Arte, en cualquiera de sus representaciones, es su secreto de la “perenne vitalidad”, y “eternas ganas de vivir”, como señaló, en el pasado mes de mayo, su amiga Fanny Mikey, en el Teatro Pablo Tobón Uribe, luego de que Dora desarrollara una improvisación tanguística, en el marco de su espectáculo “Perfume de Arrabal y Tango”.
Así nos manteníamos ella y yo:
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Fragmento de foto del blog de Sergio Esteban Vélez |
DORA RAMÍREZ, UNA VIDA DE ARTISTA**:
Dora Ramírez nació en Medellín, en 1923, en el seno de una familia de empresarios y hombres cívicos. Estudió Artes Plásticas en el Instituto de Bellas Artes, la Universidad de Antioquia y la Universidad Pontificia Bolivariana, de Medellín.
Su obra se ha presentado en más de ochenta exposiciones, entre individuales y colectivas, en importantes salas de París, Nueva York, Washington, Bruselas, Hamburgo, Miami, México, San Juan de Puerto Rico, Curacao, Medellín, Bogotá y Cali, entre otras. Descuella su exposición individual retrospectiva en la UNESCO, en París.
Luego de su muerte, la familia decidió donar la obra que aún le pertenecía al Museo de Antioquia, con la condición de que hubiera una sala dedicada a exponerla, proyecto que, al parecer, iniciará el próximo año, 2023, cuando se celebra su centenario de natalicio.
Fue ganadora, en 1961, del I Premio Dibujo Artes Plásticas, en Medellín, y en 1965, del Premio Nacional de Artes Plásticas “Fabricato”. Obtuvo también una beca como “artista en residencia”, en Boston Massachussets, en 1980.
Dirigió la ejecución de varios murales, en Medellín y ha desarrollado una profusa labor de gestión cultural en su ciudad, a través de cuatro decenios, como miembro de importantes juntas culturales. Destaca su gestión, en la Junta del Museo de Antioquia, que fue clave para la consecución de la primera gran donación de su amigo Fernando Botero a ese museo. Fue fundamental en la junta de cultura del Metro de Medellín, uniendo a muchas personas a pensar cómo el arte podría ayudar a la construcción de la cultura de amor por el Metro, entre las cuales está la idea de Humberto Pérez de la bella colección de Vírgenes por distintos artistas de la ciudad (Fernando Botero, Óscar Jaramillo, Fernando Acosta, Humberto Pérez, Débora Arango, entre otros artistas sobresalientes). La sala de exposiciones de la Universidad Autónoma Latinoamericana, de Medellín, lleva el nombre de “Dora Ramírez”.
Recibió diversas condecoraciones en su vida, hasta que amenazas de secuestro en su vida la llevó a no seguir trabajando en arte por su exposición al público. Su obra está presente en numerosos museos y colecciones sobresalientes de Colombia, Estados Unidos, Alemania y otros países, y ha sido comentada en importantes publicaciones del mundo.
*http://gardelysusmonumentos.blogspot.com/2010/12/gardel-en-llamas-homenaje-gardel.html
** http://sergioestebanvelez.over-blog.es/article-34465869.html
