Luis Ospina

En este momento hay que ir al MAMM a ver la retrospectiva (ojo es cine, por ende, proyecciones) de películas y documentales de Luis Ospina (www.luisospina.com) que empezó el pasado 15 de noviembre y estará casi todo el mes, 2018.

¡Nos vemos! 

A Luis Ospina lo conocí en 2007 y desde entonces, hemos estado conectados desde el alma, el espíritu o como se llame esa cosa que imanta el encuentro con los seres que se cruzan a uno en la vida para quedarse.
El jueves pasado, cuando inició la restrospectiva (la segunda más grande que le han hecho en el mundo), y nos fuimos a conversar él, Mónica Idárraga (amiga y cámara en mi proyecto de música nuevo Belladonna Wild) y yo:

–Te conocí pelada–, me dice mirándome a los ojos con esa sonrisota de siempre (tan hermosa, tan abierta, desde adentro), refiriéndose a mi cabeza rapada.
–Claro–, le digo yo, riéndome, que acababa de retocarme la rapada que había iniciado el 17 de abril de ese año 2007. –Eso fue el año que escribí la base para la Ley*. Estaba desesperada en la casa donde estábamos alojándonos un amigo y yo, queriendo terminar mi tarea de escribir cómo me soñaba el futuro que podría promover con la Ley de honores a mi padre y cuando al fin terminé, salí a la calle, como desbocada y, en una callecita después de un parque (yo iba subiendo), y al lado de una cuneta de las de piedra de Santa Fe de Antioquia, nos encontramos Luis Ospina* y yo.

Empecé a sonreír mientras caminaba hacia arriba, afanada por encontrarme con los amigos y disfrutarme el Festival al fin, pero feliz por la coincidencia de encontrármelo así: él bajaba solo (o al menos eso percibí), y yo sabía quién era; y yo subía sola (ídem)… y/pero pelada.

Cuando nos encontramos nos saludamos y empezamos a conversar como si siempre nos hubiéramos conocido y terminamos entrando a un restaurante y tomándonos un trago y alguna que otra cosa. Era por la tarde y, nunca más hemos vuelto a separarnos (aunque hayan pasado unos años sin vernos).
Después, nos hemos encontrado no sé cuántas veces y, siempre: “con la amistad de siempre” como escribió en la dedicatoria de la peli… y yo pensé: sí, es una amistad desde siempre.

Acabé de ver los cortos, que son las ñapas en la película TODO COMENZÓ POR EL FIN, que están geniales.

El corto HAY QUE SER PACIENTE es pero absolutamente genial; la textura que tienen las imágenes, la señora contando las historias, las repeticiones de los textos de las rutinas… ah, conmovedor, doloroso, bellísimo, preciso.

El corto ACTO DE FE (Redux), es la remasterización con unos pedazos de archivo, pues la película original estaba muy dañada. No me la vi sin remasterizar, pero es… éstas son las notas que tomé mientras lo veía:

         Me encantan las imágenes y sensaciones de Opsi en Acto de fe, pero me da pánico: ¡psico!

         El sonido <3 impresionante="" span="">

         Qué particular que el sujeto se veía bonito al principio y se vé feo, literalmente, al final.

         Buena, pero buena claro que la base es buena: Jean Paul Sartre

         1970

         KODAK 4X

Mejordicho, cuando vayan a las pelis en el MAMM, vayan a comprarla, porque TODO COMENZÓ POR EL FIN es buenísima y, además, tiene más ñapas deliciosas.

Qué monstruo es Luis Ospina
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* Ley 1619 de 2013

**a quien le rendían homenaje ese año en el Festival de Cine que se realiza allí en diciembre de cada año: www.cinefagos.net/index.php/cine-colombiano/articulos-y-ensayos/379-viii-festival-de-cine-y-video-de-santa-fe-de-antioquia.html

*** Normalmente no comparto cosas así, pero esta vez lo hago para que tengan en la cabeza la imagen de la peli y vayan a comprarla al http://www.elmamm.org/